En 1911, recogiendo la experiencia que, como empresario ferrocarrilero y bananero, el norteamericano Minor Cooper Keith tenía, junto a él un grupo importante de otros empresarios norteamericanos y europeos, decidieron fundar una asociación empresarial conocida como el Sistema Interamericano de Ferrocarriles, la cual pretendía sistematizar la explotación de los recursos agrícolas y de transporte de los países del istmo centroamericano. Con nuestro trabajo, nosotros, que contamos con toda la información de dicha compañía, pretendemos revelar los entretelones de la dinámica empresarial de la misma y medir, a través de ella, el impacto real de los ferrocarriles en el crecimiento económico en el crecimiento económico de nuestros países. Con este estudio, que completa una vieja tarea que como historiadores hemos realizado por años, buscamos contribuir para una mejor comprensión de la forma en que los ferrocarriles impactaron el sector exportador de los países centroamericanos. Hablar de distorsión del mismo requiere una demostración y con los documentos de que disponemos, es posible esto más que nunca.
*Rodrigo Quesada explica que esta investigación forma parte de la “historia empresarial” o “historia de los negocios”, llamada así por los historiadores economistas positivistas norteamericanos. Se sirve de la teoría del Imperialismo clásica para enriquecer el estudio de las inversiones extranjeras en América Central y el Caribe durante la segunda mitad del siglo XIX y primera del XX. Énfasis en fuentes primarias y estadística= historia cuantitativa.